martes, 24 de noviembre de 2009

Arte

El ser humano también expresa el pensamiento simbólico mediante diferentes formas de arte como la pintura, la escultura y la música. El objeto más antiguo conocido con un posible valor simbólico y artístico data de hace unos 250.000 años y procede del yacimiento de Berekhat Ram en Israel. Los científicos han interpretado este objeto, una figura esculpida en una pequeña pieza de roca volcánica, como una representación del contorno de un cuerpo femenino. Entre los escasos posibles objetos de arte del periodo comprendido entre hace 200.000 y 50.000 años, procedentes del oeste de Europa y atribuidos normalmente al hombre de Neandertal, se encuentran dos colgantes sencillos —un diente y un hueso con agujeros taladrados— y varios fragmentos estriados o pulidos de dientes y huesos.
En yacimientos de hace más de 400.000 años se han encontrado fragmentos de pigmentos rojos y negros que pueden haber sido utilizados para decorar el cuerpo u objetos perecederos tales como utensilios de madera o indumentaria confeccionada con pieles de animales, aunque esta evidencia no ha llegado hasta nuestros días. Pruebas del uso sofisticado de pigmentos para fines simbólicos —tales como rituales religiosos— sólo se ha encontrado en restos de hace unos 40.000 años. Del inicio de este periodo se han hallado diferentes tipos de lápices de cuidadosa factura que se utilizaban para pintar así como evidencias de que el ser humano quemaba pigmentos para fabricar diferentes colores.
El ser humano comenzó a crear y utilizar objetos simbólicos avanzados hace entre unos 50.000 y 30.000 años. Gran parte de este arte parece haber sido utilizado en rituales —posiblemente ceremonias para pedir a los espíritus éxito en la caza. El registro arqueológico muestra un enorme florecimiento del arte en el periodo comprendido entre hace 30.000 y 15.000 años. Durante este periodo el ser humano se adornaba con complicadas joyas de marfil, hueso y piedra y tallaba bellas figuras representando animales y formas humanas. Muchas tallas, esculturas y pinturas son representaciones estilizadas del cuerpo femenino. Algunos científicos creen que estas figuras femeninas representan la fertilidad.
En las primeras pinturas rupestres se hacía un uso sofisticado de la textura y el color. La zona de lo que actualmente es el sur de Francia contiene numerosos yacimientos famosos con este tipo de pinturas como, por ejemplo, las cuevas de Chauvet, con arte de hace más de 30.000 años, y Lascaux, con pinturas de hace más de 18.000 años. También es de gran importancia la cueva de Altamira, en España, que contiene restos datados en más de 15.000 años de antigüedad. En algunos casos los artistas pintaban en paredes que sólo podían alcanzar con gran esfuerzo, por ejemplo, arrastrándose. El acto de llegar hasta estas pinturas les confiere una sensación de misterio y ritual. Por ello los arqueólogos se refieren a algunas de las cámaras pintadas más extraordinarias como santuarios. Sin embargo, en la actualidad no se sabe con seguridad el significado que estas primeras pinturas y grabados podían tener para los artistas que las crearon.

No hay comentarios:

Publicar un comentario